VILERMA
Compromiso: Ribeiro
Corre 1977 cuando Arsenio Paz y Chon Labrador adquieren a Vilerma, un lugar acasarado siglos atrás, que mira al sur y al poniente desde las laderas de Gomariz y a las curvas del Río Avia, cuna de Ribeiros por excelencia.
“Hacer un poco de buen vino ribeiro para los amigos” es una intención que surge mientras comienzan las primeras obras para rehabilitar la propiedad. Un deseo difícil de conseguir en un mar de palomino y garnacha, castas foráneas de gran rendimiento pero de muy baja calidad para su vinificación en esta zona. Sin pretenderlo, aquel modesto deseo pronto deriva en una explotación profesional del viñedo y contribuye a la recuperación de la calidad y el prestigio de los vinos del ribeiro y de modernizar los procesos de producción y elaboración tradicionales.
Así, en 1978, fue necesaria una compleja y laboriosa búsqueda de patrones de las variedades tradicionales y propias de la denominación, la producción de las plantas, su implantación y cultivo. También, numerosos procesos de investigación y ensayos tanto en la bodega experimental del Ribeiro como en la propiedad. Aquellos trabajos y ensayos de esta y algunas otras bodegas resultaron fundamentales en la regeneración y resurgimiento de la D.O. y de la excelencia de los vinos blancos y tintos que en ella se producen.
En 1987 se incorpora formalmente al mercado la marca Vilerma, blanco y tinto, vinificando exclusivamente las uvas que se cosechan en la propiedad.