MENGOBA

La bodega Mengoba es un proyecto joven, con menos de veinte años de trayectoria, que ha logrado expandirse tanto a nivel nacional como internacional. Gracias a su calidad y red de distribuidores consiguió llegar a otros territorios de Europa, América, Asía y Oceanía. Las instalaciones de la Bodega Mengoba se ubican en San Juan de Carracedo, próximas al antiguo Monasterio de Santa María de Carracedo, uno de los más importantes del Bierzo y del Camino de Santiago. Las vides están situadas en la localidad de Espanillo, en la región del Bierzo, en la cabecera del río Cúa. Grégory Pérez, su fundador, refleja su firme compromiso con el medio ambiente a través de un enfoque sostenible que respeta la biodiversidad, preservando así la autenticidad y el rendimiento natural de las uvas.

Los vinos de la Bodega Mengoba

Los vinos Mengoba se caracterizan por la vinificación con variedades autóctonas, esto implica el cultivo y uso exclusivo de uvas nativas de la región. Con esta práctica, las bodegas y viñedos Mengoba se centran en proteger la biodiversidad local y, a su vez, otorgar una identidad única a su producción de vinos, reflejando el terroir de la D.O Bierzo. Antes de llegar a la bodega, las uvas se seleccionan mediante una vendimia manual, realizada en el momento preciso de maduración. Como resultado se pueden catar vinos icónicos como el Estaladiña, elaborado con uvas de la variedad homónima. Por otra parte, también se encuentran junto a esta botella otras como El Rebolón, Brezo Godello, Mengoba Grande Cuvée, Las Tinajas y El Colao. Las variedades de uva que definen el carácter de la bodega Mengoba son Mencía, Godello y Doña Blanca, y sus iniciales forman el acrónimo "Mengoba".

Esta bodega cuenta con diversos depósitos hechos en acero inoxidable de diferentes capacidades, así como foudres y barricas de roble francés para la fermentación y envejecimiento de sus vinos blancos y tintos. También se utilizan para crianza y fermentación tinajas de barro. La variedad de depósitos permite controlar la temperatura, oxigenación y pureza de los vinos. En este sentido, la filosofía de Grégory Pérez también demuestra un arraigo a la tradición utilizando procesos de vinificación emblemáticos.

Refinar

HISTORIA DE LA BODEGA MENGOBA

Los comienzos de la bodega Mengoba se originan con el proyecto ambicioso de Grégory Pérez, un enólogo francés que se vio cautivado por la geografía montañosa del Bierzo y sus suelos, con gran potencial vitivinícola. Tras participar en proyectos con otros productores, impulsó su propia bodega en 2007. Dentro de su misión se encontraba crear vinos que respetaran la tradición, tierra y pureza de las variedades. En este sentido, además de producir vino, ha trabajado en la recuperación de espacios, prevención de incendios y sembrado de vegetación para favorecer los ciclos naturales de polinización y la biodiversidad.

Si bien es un proyecto joven, ha logrado consolidarse por su impronta sostenible y el carácter fácilmente reconocible de sus vinos. Su enfoque vinculado hacia una producción más ecológica y amigable con el planeta lo ha destacado frente a otros viticultores.

UBICACIÓN, CLIMA, VARIEDADES Y SUELO DE LA BODEGA MENGOBA

Las bodegas y viñedos Mengoba se encuentran en un paisaje de laderas montañosas, más precisamente en San Juan Carracedo, en la comarca del Bierzo, la cual se distingue por sus brisas atlánticas que proporcionan una ventilación perfecta para la sanidad del viñedo. La región donde se encuentran las vides es un área con un microclima atlántico suave de temperaturas templadas ideales para el cultivo de uva. Los terrenos destinados al cultivo se encuentran principalmente en la localidad de Espanillo, es aquí donde el proceso del vino comienza. La maduración de las uvas se da de forma lenta gracias a que, en las alturas, las temperaturas y las corrientes de aire se combinan creando un ambiente excepcional, aportando así, complejidad a los sabores y aromas del vino.

Ver más

La finca Mengoba cuenta con un suelo variado compuesto en zonas por pizarra y arcilla, lo que da los minerales necesarios para el crecimiento adecuado de las variedades que se cosechan. El suelo se caracteriza por su estructura aireada y sin tratamientos químicos, ya que la filosofía de la bodega trata las parcelas como un sistema vivo, por lo que solo recibe abonos orgánicos y controlados. Las variedades Godello y Mencía son las más reconocidas y utilizadas en los vinos Mengoba, ambas nativas de la región de El Bierzo. El hecho de que sean autóctonas permite que puedan adaptarse mejor a las condiciones climáticas y ofrecer un vino auténtico de la zona.

Cada elección en las bodegas Mengoba está estratégicamente pensada para expresar al máximo su compromiso por una viticultura ecológica, fortaleciendo el uso de levaduras autóctonas en cada viñedo para lograr vinos que representen fielmente su lugar de origen. Sus principios sostemibles también aseguran la continuidad de la vinificación tradicional y el respeto por la cultura e identidad regional.